En una operación conjunta, la Policía Nacional y la Guardia Civil han logrado incautar 66 kilos de cocaína y dos kilos de hachís, además de 210.000 euros en efectivo. El operativo, que se llevó a cabo en varias localizaciones, es parte de un esfuerzo sostenido para desmantelar redes de tráfico de drogas en la región. Las autoridades han destacado la magnitud del alijo, considerando que representa un golpe significativo para la estructura logística de los grupos criminales involucrados en el tráfico de estupefacientes a gran escala.
Durante la intervención, los agentes también arrestaron a varias personas vinculadas a la organización. En declaraciones oficiales, las fuerzas del orden subrayaron la importancia de la cooperación interinstitucional para llevar a cabo operaciones de esta envergadura. Además, señalaron que seguirán intensificando sus esfuerzos para identificar y neutralizar a otros miembros de la red. Este caso refuerza la determinación de las autoridades en su lucha contra el narcotráfico y refleja su compromiso con la seguridad ciudadana.
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