En la primera jornada del festival Mad Cool, los asistentes fueron testigos de un despliegue apabullante de talento sobre el escenario, destacándose por encima de todos, Gracie Abrams. La joven artista, quien ha capturado la atención del público con su estilo distintivo de pop, enfrentó algunos retos durante su presentación. A pesar de los problemas técnicos que interrumpieron su actuación, Abrams logró salir airosa gracias a su carisma y conexión con la audiencia, consolidándose como una de las prometedoras figuras del género.
El evento, conocido por reunir a destacados talentos internacionales, no solo sirve de plataforma para artistas consagrados, sino también para aquellos en ascenso. La actuación de Abrams, que arrancaba como una cita esperada del festival, se convirtió en un testimonio de su capacidad para superar adversidades y mantener el interés del público. Su éxito en Mad Cool no solo refuerza su estatus como nueva estrella del pop, sino que también enfatiza su habilidad para cautivar con autenticidad y pasión, dejando una marca duradera en el panorama musical actual.
Leer noticia completa en El Mundo.
