En las últimas semanas, el descontento entre algunos seguidores del presidente republicano ha crecido debido a varias decisiones políticas controvertidas. Las redadas de inmigración han sido un foco de críticas, ya que muchos consideran que las acciones del gobierno están afectando negativamente a las comunidades inmigrantes. Las operaciones, que han llevado a la detención de cientos de personas, han generado protestas y llamados a una revisión de las políticas migratorias del país, especialmente por parte de aquellos que anteriormente apoyaban al presidente pero ahora se sienten incómodos con estas medidas.
Además, la falta de transparencia en torno al caso Epstein y el reciente ataque a Irán han provocado mayor inquietud. La opacidad en la divulgación de información relacionada con la investigación de Epstein ha generado sospechas sobre encubrimientos y corrupción en niveles altos del gobierno. Por otro lado, la decisión de atacar a Irán sin una consulta clara y abierta ha alejado a ciertos votantes que temen una escalada del conflicto internacional. Estos eventos han contribuido a una sensación creciente de insatisfacción y distanciamiento entre algunos sectores que inicialmente respaldaban al mandatario.
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