Chiqui Pastor, cofundador de Personal Running Training Center, sugiere que para evaluar nuestra condición física no es necesario acudir siempre a complicadas pruebas deportivas o equipos especializados. Según Pastor, los «pequeños desafíos» de la vida cotidiana pueden proporcionar una estimación útil de nuestra capacidad física y bienestar general. Estos desafíos cotidianos pueden incluir actividades simples como subir escaleras en lugar de tomar el ascensor, cargar las bolsas de la compra sin ayuda, o realizar una caminata a paso ligero durante unos minutos. La clave reside en observar cómo respondemos físicamente a estas tareas: si nos sentimos fatigados rápidamente o experimentamos dificultades, podría ser un indicativo de que necesitamos mejorar nuestra condición física.
En su enfoque, Pastor destaca la importancia de establecer un punto de referencia personal mediante estos pequeños desafíos, y sugiere que, al superar estas sencillas pruebas con mayor facilidad y sin tanto esfuerzo, podemos medir el progreso en nuestra condición física. Asimismo, enfatiza que estas actividades no solo ayudan a evaluar nuestro estado físico, sino que también son beneficiosas para mantenernos activos en nuestra vida diaria. Pastor aboga por la integración de estas prácticas en nuestra rutina, promoviendo una vida más saludable sin la necesidad de dedicar largos periodos de tiempo al gimnasio o realizar entrenamientos exhaustivos.
Leer noticia completa en El Mundo.