La falta de aprobación de los Presupuestos Generales del Estado ha llevado al rey Felipe VI a optar por la congelación de su salario, manteniendo así la misma retribución del año anterior. Este anuncio, realizado el lunes, refuerza el compromiso del monarca con la transparencia que asumió en 2015, un esfuerzo por alinear la institución con la responsabilidad y la ética en un ambiente de creciente incertidumbre política. La asignación que el Estado destina a la Casa del Rey se mantiene en 8.431.150 euros, cifra que no se ha modificado desde 2021 y que no incluye otros gastos relacionados con la seguridad y la protección que se imputan a diferentes ministerios.
Dentro del presupuesto, el rey Felipe VI tiene una asignación fijada para 2024 en 277.361,76 euros, mientras que su esposa, la reina Letizia, percibe 152.539,92 euros y la reina emérita, Sofía, 124.814,76 euros. Sin embargo, las jóvenes Leonor y Sofía no reciben retribución por sus actividades, y Juan Carlos I, quien fue retirado de cualquier salario en 2020, tampoco figura en las cuentas. La mayor parte del presupuesto de la Casa Real se destina a gastos de personal, que suman un total de 854.712 euros, así como a los gastos corrientes que ascienden a 3.097.692 euros, destinados principalmente a actividades oficiales y representativas.
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