Moncloa ha reconocido un golpe «muy grave» a la credibilidad de España tras un fallo sistémico del sistema eléctrico que dejó al país sumido en el caos. Este colapso generó cortes de electricidad generalizados, afectando tanto a particulares como a sectores clave de la economía. La situación ha desatado críticas tanto a nivel nacional como internacional, cuestionando el mantenimiento y la actualización de las infraestructuras eléctricas del país. El Gobierno se enfrenta a una creciente presión para abordar la crisis y restaurar la confianza de inversores y ciudadanos por igual.
Ante la gravedad de la situación, el Ejecutivo ha anunciado que adoptará medidas «de choque» para mitigar los daños y prevenir futuras fallas. Estas medidas incluirán una revisión exhaustiva del sistema eléctrico y la implementación de tecnologías más avanzadas para garantizar su fiabilidad. Además, se prevé un aumento en la inversión en infraestructuras energéticas y en ciberseguridad para proteger la red de futuras vulnerabilidades. Moncloa ha subrayado su compromiso con una respuesta rápida y eficiente, buscando asegurar a la población y a los mercados de que España es capaz de superar la crisis y reforzar su sistema energético.
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