La frecuencia con la que las personas van al baño ha sido objeto de estudio desde hace décadas, con diversas investigaciones que desafían la noción convencional de que lo saludable es defecar una vez al día. Un estudio del científico británico Ken Heaton, a finales de los años 80, reveló que solo un 40% de los hombres y un 33% de las mujeres seguían este patrón. Desde entonces, la ciencia ha ampliado nuestra comprensión sobre el tema. Según el Servicio Nacional de Salud de Estados Unidos, evacuar entre tres veces al día y tres veces a la semana se considera normal. Sin embargo, normalidad y salud no siempre coinciden, ya que otro estudio reciente muestra que el hábito más común es ir al baño siete veces a la semana, con heces descritas como «una salchicha lisa y suave».
Investigaciones recientes han profundizado en la relación entre la frecuencia de las deposiciones y la salud general. Un estudio de 2023 en Estados Unidos reveló aumentos en la mortalidad para quienes defecaban menos frecuentemente, con un riesgo incrementado para cáncer y enfermedades cardiovasculares. Además, un estudio de 2024 del Institute for Systems Biology encontró que evacuar de una a tres veces al día está asociado con un mayor número de bacterias saludables en los intestinos, mientras que aquellos con menos frecuencia presentaban más toxinas en la sangre, potencialmente vinculadas a enfermedades como el Alzheimer. Estos hallazgos subrayan la importancia de mantener un ritmo intestinal adecuado no solo como cuestión de comodidad, sino como un indicador crítico de salud más amplia.
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