El Ministerio de Salud de Israel presentó un informe ante la ONU en el que detalla las condiciones inhumanas a las que fueron sometidos los rehenes del grupo Hamás durante su cautiverio. Los testimonios, recopilados de 117 cautivos liberados en noviembre de 2023 tras una tregua temporal entre el Gobierno de Israel y la milicia islamista en la Franja de Gaza, revelan actos de violencia física y psicológica, que incluyen torturas, negación de alimento y agua, así como de asistencia médica. Según el comunicado del ministro de Salud, Uriel Busso, los sobrevivientes regresaron con signos de malnutrición, deficiencias de vitaminas, y trazas de un deterioro significativo tanto físico como mental tras pasar semanas en inhumanas condiciones subterráneas.
En medio de las acusaciones y la urgencia internacional que propugna Israel, casi 15 meses desde el inicio del conflicto en octubre de 2023, aún permanecen 96 personas secuestradas en Gaza, de las cuales al menos 34 han sido confirmadas como fallecidas por el Ejército israelí. El Foro de Familias de Secuestrados y Desaparecidos ha calificado el informe de devastador, exigiendo una acción concertada a nivel global para asegurar la pronta liberación de los cautivos restantes. Señalan la necesidad de un acuerdo internacional urgente, apelando a países mediadores como Estados Unidos para frenar la continuidad del abuso infligido a quienes aún permanecen en manos de Hamás, situación que, según los testimonios, los enfrenta a un “peligro mortal”.
Leer noticia completa en El Pais.