La Confederación General del Trabajo (CGT) ha alzado su voz este 4 de marzo en la sede confederal del sindicato en Madrid, denunciando la reciente expulsión de David Blanco, Secretario de Relaciones Internacionales de la organización anarcosindicalista, del Sáhara Occidental. Blanco fue retirado del territorio sin justificación formal, tras menos de 24 horas en la ciudad ocupada de Dajla, un hecho que la CGT no ha dudado en calificar de injusto y que ha llevado a exigir al Gobierno español que condene la actuación del Reino alauita.
Miguel Fadrique, secretario general de la CGT, abrió la rueda de prensa expresando que la misión de Blanco en Dajla era conocer de primera mano la situación en el territorio para establecer contactos con compañeros que residen allí. Sin embargo, antes de completar una jornada completa, Blanco fue objeto de un intenso seguimiento que culminó con su expulsión del país.
Blanco narró cómo, el 1 de marzo, comenzó su viaje reuniéndose con Ahmed Ettanji, representantes de medios de comunicación locales, para organizar desplazamientos en la zona. A pesar de los temores iniciales de que sufrirá una devolución inmediata al llegar, consiguió instalarse en un hotel. Sin embargo, desde sus primeras horas en Dajla, Blanco se percató de una vigilancia continua por parte de la policía marroquí, quienes incluso grababan sus movimientos.
Durante su breve estancia, logró reunirse con Mohamed Anguiguiz, un activista recientemente encarcelado, así como con la familia de Aghrichi, un activista desaparecido desde hace tres años. También mantuvo encuentros con miembros de CODESA, una organización que defiende el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación y a administrar sus recursos naturales.
Al relatar su experiencia, Blanco explica que al regresar al hotel después del segundo día, fue abordado por un empleado que le informó de que debía abandonar el lugar, ya que la policía le esperaba en recepción. Fue declarado “persona non grata” en Dajla y obligado a tomar un taxi hacia Agadir, en Marruecos, un trayecto de más de 1.100 kilómetros que realizó bajo la vigilancia de un agente policial.
Miguel Fadrique retomó la palabra durante la conferencia para exigir al Gobierno de España que presente una protesta formal al ejecutivo marroquí, además de criticar la supuesta complicidad de las autoridades españolas con Marruecos. Reiteró el compromiso de la CGT con la causa saharaui, enfatizando que el sindicato continuará defendiendo el derecho a la autodeterminación de este pueblo y su resistencia frente a la represión.
Por último, Fadrique recordó a los presentes la cita semanal frente al Ministerio de Asuntos Exteriores en Madrid, donde todos los lunes se concentran para exigir al ministro José Manuel Albares que intervenga a favor de los presos políticos saharauis y el respeto por los Derechos Humanos en el territorio. Esta postura firme de la CGT refleja su continuo apoyo al pueblo saharaui en la búsqueda de reconocimiento y respeto internacionales.
Fuente: CGT
