El conocido periodista Fortes ha revelado que fue notificado de un acto de conciliación por parte de la representación legal de González Amador el pasado 5 de diciembre. Dicha notificación es un paso previo a la presentación de una querella por presuntas injurias y calumnias, lo que indica que la situación entre ambas partes ha escalado a un conflicto legal. La comunicación llegó mediante un burofax, un método formal que suele utilizarse para asegurar que el destinatario reciba documentos de importancia, lo que resalta la gravedad del asunto.
Este acto de conciliación representa un intento de resolver el conflicto fuera de los tribunales, una práctica común en la legislación española cuando se trata de acusaciones de injurias y calumnias. El proceso busca una posible solución amistosa antes de que el caso avance legalmente. Aunque los detalles de las declaraciones objeto de la disputa no se han divulgado, el hecho de que se haya tomado esta medida legal subraya la seriedad del enfrentamiento y las potenciales repercusiones para ambas partes implicadas.
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