Antes de que el WiFi invadiera nuestros hogares, los cables eran la norma para conectar los primeros ordenadores. Desde el cable coaxial hasta el popular par trenzado con conector RJ45, las conexiones físicas han sido sinónimo de estabilidad y velocidad. En la actualidad, frente a la expansión de la domótica, el streaming en 4K y los videojuegos online, resurge el interés por volver al Ethernet.
En los años 80 y 90, el cable coaxial fue el estándar, conectando ordenadores en cadena mediante conectores BNC. Sin embargo, un fallo en un dispositivo podía derrumbar toda la red. Alternativamente, se usaban cables seriales y paralelos para compartir datos entre dos ordenadores, aunque las velocidades eran lentas. El Token Ring, aunque más común en empresas, ofrecía una conectividad robusta pero costosa.
El gran salto llegó con el par trenzado y el conector RJ45, que permitió conexiones directas al switch o router, eliminando los problemas del coaxial. Este sistema, todavía vigente, ha mejorado en velocidad con el tiempo, ofreciendo desde 10 Mbps en los años 90 hasta los actuales 10 Gbps.
El WiFi, introducido a principios de los 2000, liberó a los usuarios de la maraña de cables, permitiendo una movilidad inédita. Sin embargo, esa comodidad tiene un costo. Las interferencias, la latencia variable y la seguridad comprometida son algunos de los desafíos que conlleva una conexión inalámbrica.
Por estas razones, muchos expertos aconsejan recuperar el Ethernet para dispositivos fijos, como ordenadores de sobremesa, Smart TVs, videoconsolas y servidores caseros. Las ventajas son claras: estabilidad, latencia mínima, seguridad física y velocidad garantizada. Además, al liberar la red WiFi, se optimiza la experiencia para móviles y tablets.
Conectar los dispositivos cruciales por Ethernet es más sencillo que nunca gracias a soluciones como canaletas discretas y adaptadores PLC. Este esfuerzo puede transformar radicalmente la experiencia digital del hogar.
Recordar el pasado nos enseña que cada avance tecnológico busca un balance entre rendimiento y comodidad. Si bien el WiFi aportó movilidad, es hora de reconsiderar la fiabilidad que el cable Ethernet puede proporcionar, asegurando que el hogar digital no dependa de una señal vulnerable y congestionada. Una combinación inteligente de WiFi y Ethernet se presenta como la estrategia óptima para el hogar moderno.
Más información y referencias en Noticias Cloud.