Un coleccionista jubilado sorprendió al sector cultural al devolver un valioso manuscrito a España. Comprado por unos 40 euros en un mercadillo de Chisináu, el documento había sido considerado perdido. Sin previo aviso, el coleccionista viajó a España para entregar personalmente el manuscrito a las autoridades pertinentes, gesto que ha sido aplaudido por expertos y conservacionistas. El hallazgo de este documento no solo representa un gran valor histórico, sino también un acto de generosidad que refleja la importancia de preservar el patrimonio cultural.
El manuscrito, cuya autenticidad fue confirmada tras un minucioso proceso de verificación, contiene información clave que podría arrojar nueva luz sobre un periodo poco estudiado de la historia española. Las autoridades culturales han expresado su gratitud y destacaron la importancia de la colaboración internacional en la recuperación de piezas históricas. Este suceso subraya la relevancia de los mercados secundarios donde, ocasionalmente, pueden encontrarse auténticos tesoros perdidos en el tiempo.
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