Con la llegada de noviembre, los entusiastas de la jardinería encuentran en este mes la oportunidad perfecta para planificar la siembra de plantas que transformarán su jardín en un espectáculo de color durante el verano. Este es el momento ideal para plantar especies que no solo florecerán en la temporada estival, sino que también aportarán vitalidad y diversidad a sus espacios verdes. Aquí presentamos cinco plantas esenciales para sembrar en noviembre.
La albahaca se destaca como una elección indispensable. Esta hierba aromática, popular en la gastronomía, también decora con sus llamativas flores moradas. Fáciles de cultivar tanto en macetas como en el suelo, las albahacas florecen en abundancia, atrayendo polinizadores beneficiosos como abejas y mariposas, que enriquecen el ecosistema del jardín.
Otro miembro infaltable en esta lista es el geranio. Con numerosas variedades, estas plantas son perfectas para agregar un toque vibrante a cualquier área exterior. Los geranios son de bajo mantenimiento y resistentes a las plagas, haciéndolos ideales para jardineros novatos. Su largo período de floración durante todo el verano asegura un jardín siempre colorido.
Para quienes buscan algo más exótico, el hibisco es una opción ideal. Sus grandes flores en tonos vivos de rojo, rosa y amarillo añaden un aire tropical al jardín. El hibisco requiere un ambiente cálido y soleado, por lo que se recomienda plantarlo en un lugar donde reciba luz solar directa durante varias horas al día.
Las dalias representan otra excelente alternativa, ofreciendo una variada gama de formas y colores. Sembradas en noviembre, las dalias tendrán un desarrollo vigoroso que les permitirá florecer espléndidamente en verano. Estas plantas requieren un suelo bien drenado y un riego apropiado para garantizar un crecimiento saludable.
Finalmente, el cosmos es conocido por su vivacidad y facilidad de cuidado. Sus flores, que oscilan entre el blanco y el fucsia, son perfectas para atraer mariposas y otros polinizadores. El cosmos se adapta a diversos tipos de suelo y requiere poco mantenimiento, convirtiéndose en un excelente complemento para las demás plantas mencionadas.
Iniciar la siembra en noviembre es clave para disfrutar de un jardín vibrante en verano. Con estas cinco plantas, no solo se transformará el espacio exterior en un festival de colores, sino que también se contribuirá a un ecosistema equilibrado en casa. La dedicación de este mes será recompensada cuando las flores comiencen a brotar y el jardín cobre vida durante los cálidos días estivales.


                                    