Andreu Buenafuente utilizó su monólogo en «Futuro Imperfecto» para abordar con humor el inminente festival de Eurovisión, recordando que solo faltaban 48 horas para que la representante española, Melody, dejara de interpretar «una diva es valiente». En tono de broma, el cómico sugirió que si Melody seguía cantando tras el certamen, sería por su propia culpa. Además, Buenafuente hizo una observación sobre la coincidencia de las semifinales de Eurovisión con las negociaciones entre Estados Unidos y China sobre aranceles, insinuando de manera satírica que el canto de Melody pudo influir en los acuerdos alcanzados.
La crítica de Buenafuente no se limitó al concurso musical, ya que también se refirió a la participación de Israel, comentando la falta de acciones decisivas por parte de la Unión Europea ante la controversia. Con ironía, señaló que había más probabilidades de que Israel no participara en la final por tener una mala canción que por cuestiones éticas relacionadas con su situación política. Su discurso incluyó reproches a los organizadores del festival por no tomar medidas adecuadas y concluyó que «una diva es valiente, pero algunos organizadores no».
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