El sindicato ha propuesto un frente común con las principales organizaciones laborales de España, CCOO y UGT, con el objetivo de organizar una «gran protesta». Este esfuerzo colectivo busca presionar al gobierno para implementar medidas que garanticen la revalorización automática de los sueldos en función del Índice de Precios al Consumo (IPC). La iniciativa surge en un contexto de creciente preocupación por el poder adquisitivo de los trabajadores, que se ha visto erosionado por el incremento de la inflación.
En las reuniones preliminares, los representantes sindicales han destacado la importancia de asegurar que los salarios mantengan su poder de compra en una economía en constante fluctuación. La alianza con CCOO y UGT pretende amplificar la voz de los trabajadores y aumentar la presión para que el ejecutivo considere esta revalorización salarial como una prioridad. Esta acción conjunta se perfila como un paso significativo en la consolidación de los derechos laborales y la protección del bienestar económico de los trabajadores en todo el país.
Leer noticia completa en El Mundo.