A los 40 años, el experimentado delantero logró anotar el gol del empate 2-2 en un emocionante partido de la UEFA Nations League. Este tanto marcó un momento crucial para el futbolista, convirtiéndose en una reivindicación personal tras las amargas experiencias en el Mundial 2010 y la Eurocopa 2012, competiciones en las que no logró brillar como esperaba. Sin embargo, minutos después de su destacada actuación, el jugador sufrió un problema muscular que lo obligó a dejar el campo, generando preocupaciones sobre su estado físico.
El partido, lleno de intensidad y emoción, fue un reflejo de la capacidad del delantero para mantenerse competitivo a pesar de su edad. Su gol significó no solo un alivio para su equipo, sino también un momento de satisfacción personal en una carrera marcada por desafíos y decepciones en torneos internacionales anteriores. Aunque la lesión opacó brevemente el momento, su actuación dejó claro que aún posee el talento y la determinación que lo han caracterizado a lo largo de los años.
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