Nicolás Maduro, en una rueda de prensa con medios internacionales, advirtió sobre una posible radicalización en respuesta a presiones externas y acusaciones de fraude electoral. Reiteró que Venezuela está en paz y señaló a figuras internacionales como Bolsonaro y Elon Musk, responsabilizándolos de intentar desestabilizar el país. Maduro denunció actos violentos de la oposición, justificando más de mil arrestos durante las protestas, y afirmó haber capturado al líder de un supuesto complot para atacar una represa hidroeléctrica. Pidió al Tribunal Supremo de Justicia validar su victoria en los comicios y respondió al informe del Centro Carter, asegurando tener «la conciencia tranquila». Además, señaló que opositores como María Corina Machado y Edmundo González deberían estar en prisión.
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