En medio de la creciente controversia política en España, la empresa Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica SLU, vinculada a la familia de Sara Aagesen, actual vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, ha sido objeto de escrutinio debido a la recepción de más de 1,2 millones de euros en contratos públicos en los últimos cinco años. Estos contratos, adjudicados por diversos ministerios, se realizaron durante el tiempo en que Aagesen sirvió como secretaria de Estado de Energía. La empresa, que se especializa en instrumentación acústica, ha sido favorecida con al menos 80 contratos por parte de sectores gubernamentales como Defensa, Industria y Ciencia. Harald Aagesen, hermano de la ministra, funge como director de ventas de la compañía desde 2020, coincidiendo con el ascenso de su hermana dentro del Ministerio.
Por otro lado, las conexiones familiares de Aagesen han suscitado críticas respecto a posibles conflictos de interés. El Partido Popular ha denunciado en el Senado que el Gobierno ha favorecido a empresas relacionadas con la familia de la ministra. Entre estas, se encuentra la startup de su esposo, teCH4+, que ha sido beneficiada con ayudas del Gobierno, etapa en la que ella era asesora en el Ministerio. La ministra, defendiendo a su familia, afirmó que estas ayudas no provienen de su ministerio, y enfatizó que sus familiares continuarán en sus empleos, independientemente de las críticas. Esta situación ha estimulado el debate sobre la transparencia y el manejo de los fondos públicos por parte del Gobierno.
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