Las obras de construcción de un aparcamiento subterráneo de cuatro plantas en el distrito de Chamberí han generado controversia entre los residentes locales. La empresa Arapiles Park S.L. inició la tala de árboles en el terreno de la calle Arapiles tras adquirir la parcela de Merlin Properties, provocando protestas de vecinos que alegan posibles riesgos estructurales para los inmuebles circundantes, construidos en los años 50 y 60. A pesar de tener la aprobación municipal desde mayo de 2022, los residentes han interpuesto un interdicto para detener temporalmente las obras y preparan un recurso ante el Tribunal Supremo, citando también preocupaciones sobre la accesibilidad para los bomberos y el impacto en el entorno sonoro de la zona.
Simultáneamente, otro proyecto similar en el distrito de Retiro enfrenta resistencia vecinal, con una manifestación programada para exigir la revisión de la licencia de construcción, recordando un incidente anterior en marzo cuando la policía detuvo el paso de maquinaria pesada por zonas residenciales. Estos conflictos destacan la creciente tensión entre las necesidades urbanísticas y la oposición ciudadana a las intervenciones en espacios urbanos densamente poblados. En un caso separado, un juzgado de Madrid ha ordenado la paralización de las obras para un nuevo parking junto al estadio Santiago Bernabéu, alegando falta de interés público y preocupación por el daño medioambiental, tras una demanda vecinal.
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