Hassan, un solicitante de asilo palestino, ha llegado a Madrid para celebrar el reciente alto el fuego en Gaza, un respiro en el conflicto que ha afectado profundamente su vida y la de su familia. Desde su llegada a España hace más de un año y medio, se ha integrado en el Programa de Protección Internacional, que ofrece apoyo económico y alojamiento temporal a personas en su situación. Sin embargo, su experiencia ha estado marcada por la soledad y la preocupación constante por sus seres queridos, quienes todavía residen en una región plagada de tensiones.
A pesar de las dificultades, Hassan busca establecerse en Madrid en busca de oportunidades laborales que le permitan reconstruir su vida lejos de la violencia. La celebración del alto el fuego le otorga un rayo de esperanza en una realidad que ha estado definida por la espera y la incertidumbre. Este momento compartido con amigos en España es un recordatorio de la paz efímera y el deseo profundo de una estabilidad duradera para él y los suyos en Gaza.
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