El Centro de Cultura Contemporánea Condeduque, un destacado epicentro cultural de Madrid, ha desvelado sus dos nuevas exposiciones simultáneas, propuestas que desafían la percepción tradicional del arte al invitar a los visitantes a explorar desde un prisma sensorial y táctil. Las instalaciones, tituladas «CARRUSEL» y «WASI LLAMKHA (LUGAR Y TACTO)«, ofrecen un viaje inmersivo desde el 28 de febrero hasta el 18 de mayo.
En la Sala de Bóvedas, «CARRUSEL» despliega la colaboración artística entre Julia Fuentesal, Pablo Arenillas e Itziar Okariz. Este trío ha transformado el espacio con una estructura dinámica que fusiona escultura y performance. El recorrido entre 500 piezas de textiles suspendidos permite al espectador interactuar con creaciones que reflejan un diálogo estético y conceptual. Cada tela, diseñada y modificada meticulosamente, representa un acto de correspondencia artística entre las ciudades de Madrid, Bilbao y Nueva York, generando una narrativa transatlántica de arte vivencial. Las grabaciones de estas interacciones, realizadas por Abel Jaramillo, dotan de vida a los espacios con proyecciones que complementan la experiencia sensorial.
Paralelamente, en el Patio Sur, Andrea Canepa aporta una dimensión arquitectónica y contextual con «WASI LLAMKHA (LUGAR Y TACTO)«. Inspirada en las antiguas técnicas de memoria andinas y los métodos renacentistas occidentales, Canepa presenta un pabellón que desafía los límites de la percepción sensorial. El espectador es incitado a cerrar los ojos, a palpar y a escuchar, en un entorno que une texturas y materiales diversos como ladrillo, grava, y azulejos. Estas superficies designan fragmentos de texto, evocando sistemas de memoria como los quipus andinos y la Ars memorativa renacentista.
Ambas exposiciones, gestionadas por Marta Ramos-Yzquierdo mediante el programa ‘El sonido del roce de tu ojo al pasar’, revelan un enfoque innovador del Caribe el arte. La colaboración entre organismos como el Ayuntamiento de Madrid, la Blueproject Foundation y la Fundación ‘la Caixa’ en el marco de su programa ‘Apoyo a la Creación’ subraya la apuesta por una oferta cultural que trasciende los límites de lo visual.
De este modo, el Condeduque se consolida como un espacio de encuentro cultural donde el arte no solo se observa, sino que se experimenta de manera integral, estimulando los sentidos y desafiando las convenciones.