Con la llegada del verano y las previsibles olas de calor, se hace indispensable proteger el material de oficina, especialmente las impresoras y sus cartuchos de tinta, más aún si van a quedar inactivos por un tiempo prolongado. En este contexto, 123tinta.es, el conocido ecommerce de cartuchos y toners, ha divulgado una serie de recomendaciones para asegurar el óptimo estado de estos insumos y evitar su prematuro deterioro.
Para los cartuchos que aún no se han instalado en las impresoras, la empresa recomienda mantenerlos dentro de su embalaje original, evitando abrirlos o desprecintarlos hasta el momento de uso. Es crucial almacenarlos en un sitio protegido de la luz directa, tanto solar como artificial, y asegurarse de que la temperatura ambiente sea constante, alrededor de los 20 grados Celsius. Además, es importante que el nivel de humedad en el entorno se mantenga entre el 20% y 80%.
Cuando se trata de cartuchos ya instalados en las impresoras, hay que tener en cuenta que la exposición a altas temperaturas puede secar la tinta líquida en el cabezal, dificultando la impresión. Por ello, se sugiere imprimir al menos un par de páginas a la semana para evitar el secado de la tinta. En caso de no poder realizar estas impresiones periódicas, la mejor alternativa es retirar el cartucho de la impresora y almacenarlo adecuadamente.
Para el almacenamiento de los cartuchos utilizados, se recomienda colocarlos en un recipiente hermético, preferiblemente de plástico tipo «tupper», añadiendo una esponja o paño húmedo en el interior del recipiente para mantener la humedad y conservar la tinta en buen estado. Estos recipientes deben mantenerse en un lugar fresco y protegido de la luz directa.
Además de los cuidados de los cartuchos, es fundamental realizar el mantenimiento y limpieza periódica de las impresoras. Si se prevé que la impresora va a estar inactiva durante un tiempo prolongado, es conveniente hacer una limpieza exhaustiva y revisar los cabezales de impresión.
Estas precauciones no solo contribuyen a extender la vida útil de los cartuchos y las impresoras, sino que también garantizan una mejor calidad y eficiencia en las impresiones cuando los equipos vuelvan a ponerse en uso. Con estas medidas, se pueden prevenir muchos inconvenientes ligados al mal estado de los insumos, especialmente durante la temporada de calor.