En un anuncio realizado durante su visita a las instalaciones, Borja Carabante, delegado de Medio Ambiente y Movilidad, ha delineado un nuevo conjunto de medidas destinadas a mejorar la infraestructura de transporte sostenible en la ciudad. Esta iniciativa busca impulsar el uso de medios de movilidad ecológicos y reducir la huella de carbono urbana.
Carabante explicó que el enfoque principal será ampliar la red de carriles bici, promoviendo así su uso entre los ciudadanos. Según las autoridades, esta expansión no solo facilitará los desplazamientos diarios, sino que también contribuirá a mejorar la calidad del aire.
Además, se ha detallado un plan para reforzar la red de transporte público con la incorporación de vehículos eléctricos. Esta medida está diseñada para ofrecer una alternativa más limpia y eficiente a los sistemas tradicionales de transporte que aún dependen de combustibles fósiles.
Durante su recorrido por las instalaciones, Carabante destacó los beneficios a largo plazo de estos proyectos, subrayando que «una ciudad más verde y sostenible es un legado para las futuras generaciones». También hizo hincapié en la importancia de la colaboración entre el sector público y privado para llevar a cabo estas iniciativas de manera exitosa.
Asimismo, se han programado actividades de concienciación para involucrar a la comunidad en estos cambios, promoviendo una cultura de movilidad sostenible que abarque desde el uso compartido de vehículos hasta la caminata activa.
Las reacciones al anuncio han sido mayoritariamente positivas, aunque algunos sectores han expresado su deseo de conocer más detalles sobre el cronograma y la financiación de los proyectos. Sin embargo, el compromiso mostrado por las autoridades ha sido bien recibido, sentando las bases para un futuro urbano más amigable con el medio ambiente.