El avance en las obras de soterramiento de la A-5 implicará un importante reajuste en el tráfico y los accesos peatonales de la zona sur de Madrid. A partir de la madrugada del 10 de febrero, la calzada sur de la arteria principal será cerrada al tráfico, obligando a desviar toda la circulación hacia la calzada norte, que permanecerá operativa solo en sentido de salida de Madrid. Este ajuste dejará la capacidad de la vía reducida a la mitad, manteniendo dos carriles por sentido. Tal situación se extenderá previsiblemente hasta finales de año, según informó el Ayuntamiento de Madrid a través del Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad.
Las complejas maniobras de construcción correrán a cargo de máquinas que comenzarán a perforar la superficie en la zona de Sanchorreja este jueves, con el objetivo de instalar los pilotes que servirán de base a las tres pantallas del futuro túnel subterráneo. Variando en longitudes de entre 14 y 17 metros, estos pilotes configurarán las pantallas sur, central y norte del corredor subterráneo. Inicialmente, se acometerá la construcción de las pantallas sur y central, para luego establecer una losa superior sobre la que se urbanizará el Paseo Verde del Suroeste, una iniciativa de mejora urbano-paisajística que busca unir barrios actualmente separados por la concurrida autovía.
La descongestión del tráfico rodado no es la única preocupación que aborda este proyecto. A partir del 10 de febrero, se eliminarán varios pasos inferiores peatonales, empezando por el enlace de Boadilla y extendiéndose a otras localizaciones como la calle San Juan de la Mata y la calle Villamanín, por citar algunos. Para mitigar los efectos de estas supresiones, se establecerán alternativas a través de existentes pasos inferiores o mediante el uso de la pasarela del Anillo Verde Ciclista. Además, la Empresa Municipal de Transportes (EMT Madrid) ofrecerá desde ese mismo día un servicio especial gratuito de autobuses en ruta circular para unir los barrios de Lucero y Batán, facilitando así la movilidad de los transeúntes en la zona afectada.
Durante el tiempo que duren las obras, las autoridades han decidido establecer una velocidad máxima permitida de 50 km/hora en la zona de labores, asegurando que el tránsito, aunque reducido, sea seguro para los conductores.
Para aquellos interesados en seguir de cerca el progreso de las obras, el plan de movilidad y las rutas alternativas, el Ayuntamiento habilitó una página web donde se detalla la información necesaria para usuarios y vecinos, en www.madrid.es/paseoverdesuroeste. Con estas acciones, el gobierno local busca minimizar el impacto negativo y maximizar los futuros beneficios de la remodelación para una movilidad más eficiente y sostenible en la ciudad.