Esta mañana, en un acto celebrado en el Ayuntamiento de Alcalá de Henares, se ha anunciado el lanzamiento de una innovadora campaña que aúna reciclaje y solidaridad. La iniciativa, denominada “Ahora reciclar también es ayudar”, tiene como objetivo no solo promover el reciclaje entre los vecinos, sino también apoyar a la Asociación Española del Síndrome Prader-Willi (AESPW).
Los concejales Vicente Pérez, responsable de Medio Ambiente, y Teófilo Lozano, encargado de Salud, han sido los encargados de presentar la campaña junto a Beatriz Aylagas, coordinadora ESG de Ecoembes, y Aurora Rustarazo, psicóloga de la AESPW. Según explicaron, durante un mes, los 127 contenedores amarillos de la ciudad mostrarán pegatinas que invitan a los ciudadanos a reciclar envases de plástico, latas y briks para colaborar con la causa benéfica.
La campaña, que empieza hoy 18 de diciembre y se extenderá hasta el 18 de enero, prevé recompensar los esfuerzos de reciclaje de los alcalaínos con una donación de 5.000 euros por parte de Ecoembes a la AESPW. Estos fondos se destinarán al desarrollo de actividades terapéuticas para niños y niñas que padecen este síndrome, una enfermedad poco frecuente que afecta directamente a unas 3.000 personas en España.
Beatriz Aylagas subrayó la importancia de combinar reciclaje y solidaridad. “El ciclo del reciclaje no solo fomenta un mundo más sostenible, sino que ahora también apuesta por un impacto social positivo”, manifestó, alentando a los vecinos a intensificar sus esfuerzos de reciclaje. Para Aylagas, la colaboración ciudadana es clave para promover una sociedad más inclusiva.
Por su parte, Teófilo Lozano expresó que iniciativas como esta estrechan vínculos entre el compromiso social y la salud, llamando la atención sobre enfermedades raras que requieren apoyo comunitario. «Afecta a muchas personas más allá de las diagnosticadas, involucrando a familiares y seres queridos», añadió.
Aurora Rustarazo expresó su agradecimiento tanto al ayuntamiento como a Ecoembes por facilitar una acción conjunta de solidaridad y responsabilidad ambiental. Destacó que estas acciones están impregnadas de «buenos deseos para el planeta y el futuro de nuestros hijos», resaltando la importancia del respaldo de instituciones y personas comprometidas socialmente.
La campaña, que ya se ha implementado en ciudades como Fuenlabrada, Rivas Vaciamadrid y Pozuelo de Alarcón, se presenta como un modelo replicable que combina el enfoque ecológico con un fuerte componente humano, proyectando un mensaje de esperanza y cooperación hacia un futuro más inclusivo y sostenible.
