Los residentes de Colmenar Viejo y Tres Cantos han alzado su voz en contra de la instalación de una planta de tratamiento de residuos en su localidad, un proyecto que está en las etapas finales de los trámites municipales. La planta, diseñada para transformar 25.000 toneladas de residuos orgánicos anualmente y alcanzar hasta 75.000 en su sexto año, tiene como objetivo producir biometano y biofertilizantes. Sin embargo, los vecinos consideran que esta iniciativa podría deteriorar su calidad de vida con mayores emisiones contaminantes, malos olores y un incremento en el tráfico de camiones, además de impactar negativamente el valor de sus propiedades.
En respuesta a la creciente preocupación ciudadana, la plataforma ‘Stop Biogás Colmenar Viejo’ ha convocado protestas y actividades informativas, destacando los riesgos del proyecto cerca de áreas residenciales y escolares. Aunque las empresas promotoras, PreZero y Enagás Renovable, afirman que la planta está diseñada con «las mejores técnicas disponibles» para mitigar olores y otros inconvenientes, los vecinos siguen demandando un cambio de ubicación. Las autoridades aseguran que el proyecto cuenta con todas las evaluaciones de impacto ambiental necesarias y que mantiene un enfoque en la economía circular y la transición energética, con planes para iniciar operaciones en 2026.
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