La reciente decisión del Gobierno de condonar parte de la deuda pública catalana ha vuelto a poner en el foco a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. La medida, presentada como una estrategia para aliviar las arcas autonómicas, ha sido criticada por el Partido Popular y figuras destacadas del socialismo, como el ex presidente Felipe González, quien la calificó de «timo». Montero, quien ahora defiende con entusiasmo la iniciativa como parte de los pactos del presidente Pedro Sánchez con el independentismo catalán, se enfrenta a la hemeroteca que revela su postura contraria hace apenas unos años. En 2018, como consejera de Hacienda de la Junta de Andalucía, Montero rechazaba cualquier plan de condonación de deuda si no se revisaba antes el modelo de financiación autonómica, postura que ahora se revela contradictoria respecto a su apoyo actual.
En el contexto de 2018, Montero criticó con dureza al entonces ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, por siquiera considerar la condonación de deuda autonómica, especialmente cuando la Generalitat de Cataluña era el mayor deudor del Estado. La ministra afirmaba vehementemente que no compartiría una quita de deuda incluso si beneficiara a Andalucía. Sin embargo, la llegada de Sánchez al poder trajo un cambio rotundo en su discurso. Ahora, la grabación de sus declaraciones pasadas cobra relevancia, cuestionando la coherencia de su posición actual. Este giro en sus posturas subraya las tensiones políticas y los compromisos que el Gobierno de Sánchez asume para garantizar el respaldo del independentismo catalán y prolongar su estancia en La Moncloa.
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