Con el inicio del mes de septiembre, miles de agricultores a lo largo de todo el país se preparan para una nueva campaña de vendimia, recogiendo con esmero el fruto que han cuidado durante todo un año. Esta recolección no solo marca el comienzo de una nueva fase en el ciclo vitivinícola sino también la promesa de nuevos vinos que acompañarán nuestras mesas en los próximos meses. En este contexto, se hace relevante la nueva guía de vinos monovarietales Wine Up!, que abarca vinos catalogados desde septiembre de 2017 hasta agosto de 2018, y ofrece un adelanto de las valoraciones para la guía del 2019.
Un vino monovarietal se define como aquel que contiene al menos un 85% de una sola variedad de uva. La guía de este año recoge cerca de 700 vinos elaborados con 58 variedades diferentes, cada una detalladamente explicada en cuanto a sus características aromáticas y gustativas.
Un fenómeno notable en la actual campaña es el incremento de vinos elaborados con variedades minoritarias autóctonas, fruto del esfuerzo de bodegas y viticultores por recuperar estas uvas. Este trabajo no solo diversifica la oferta en el mercado, sino que también presenta buenas perspectivas en términos de calidad y adaptación al cambio climático, contrarrestando, por ejemplo, el aumento del grado alcohólico que este fenómeno puede provocar en el viñedo.
La presente edición premiará con las menciones «The Spanish Monovarietal Wine Ambassador» a los vinos más puntuados de cada variedad. Aquellos vinos que superen los 93 puntos recibirán una distinción de gran oro, mientras que los que obtengan más de 90 puntos recibirán una medalla de oro. Los vinos que no alcancen los 85 puntos, por otro lado, no estarán presentes en la guía.
Como en años anteriores, los vinos son evaluados en sesiones de cata de un máximo de 60 muestras y mediante el sistema de cata ciega, garantizando que solo el vino, y no su etiqueta o origen, sea lo que se valoré.
Este año, la guía ha superado nuevamente en términos de participación, tanto de bodegas como de sus vinos y destilados, con cerca de 700 referencias provenientes de las principales denominaciones de origen españolas.
Con cada botella descorchada, no solo se saborea el producto del trabajo y la dedicación de los viticultores, sino también un pedazo de la historia, la cultura y la innovación que caracterizan al mundo del vino en España.
