Un equipo de físicos de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) ha dado un paso crucial en el desarrollo de comunicaciones más seguras con un innovador dispositivo cuántico capaz de transmitir mensajes cifrados incluso en situaciones extremas, como desastres naturales o fallos en las telecomunicaciones tradicionales. Este avance forma parte del proyecto internacional COMPHORT, financiado por la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y enmarcado en la red europea de tecnologías cuánticas ERANET-QuantERA.
La clave: fotones individuales a temperatura ambiente
El dispositivo desarrollado es capaz de emitir fotones individuales, partículas de luz que sirven como vehículo para el cifrado cuántico. A diferencia de los sistemas actuales que requieren temperaturas criogénicas, esta tecnología funciona a temperatura ambiente, haciendo que su implementación sea más sencilla y económica.
Carlos Antón, coordinador del proyecto, destacó: “Un fotón único no puede dividirse ni clonarse, lo que lo convierte en la herramienta perfecta para garantizar la privacidad absoluta en las comunicaciones. Nuestro objetivo es crear un dispositivo compacto y fácil de usar, sin necesidad de sistemas complejos como los láseres convencionales”.
El dispositivo incluye un material especial, el nitruro de boro hexagonal, que genera los fotones individuales, y utiliza una cavidad óptica –dos espejos paralelos que maximizan la interacción con los fotones– para mejorar su eficiencia. Esta tecnología podría estar lista para finales de 2025.
Pruebas en el corazón de Berlín
El equipo internacional probará su tecnología en un entorno urbano real: el centro de Berlín. Las pruebas, que se realizarán en distancias de hasta 750 metros, buscarán validar la capacidad de transmitir mensajes cifrados a través del aire en condiciones reales, incluyendo la contaminación lumínica y otros desafíos de las ciudades modernas.
“La comunicación cuántica es crucial en situaciones donde la infraestructura tradicional no está disponible, como en desastres naturales o entornos temporales como hospitales de campaña. Además, esta tecnología podría garantizar comunicaciones seguras en drones, vehículos autónomos o aeronaves”, explicó Antón.
Colaboración global con sello español
El proyecto COMPHORT reúne a investigadores y empresas de España, Alemania, Turquía y Reino Unido. En España, la Agencia Estatal de Investigación ha jugado un papel clave al financiar este esfuerzo colaborativo, que busca posicionar a Europa a la vanguardia de las tecnologías cuánticas.
Entre las instituciones participantes destacan la Technische Universität Berlin, el University of Bristol, y empresas tecnológicas como Nanoplus Advanced Photonics. El proyecto, que comenzó en julio de 2024, se extenderá hasta junio de 2027, con el objetivo de crear una tecnología funcional y adaptable para múltiples usos.
Hacia un futuro de comunicaciones más seguras
Este avance no solo supone una mejora en la seguridad de las comunicaciones, sino que también abre la puerta a aplicaciones prácticas en diversos sectores. Desde garantizar la privacidad en comunicaciones críticas hasta proteger redes de movilidad inteligente, el sistema desarrollado por COMPHORT representa un paso hacia un futuro más seguro y conectado.
Con su compromiso con la innovación, España sigue consolidándose como líder en el desarrollo de tecnologías emergentes, demostrando que la ciencia y la colaboración internacional son claves para abordar los retos del siglo XXI.