El Gobierno de Navarra ha decidido desvincularse de la adjudicación del contrato del túnel de Belate a la UTE Servinabar-Acciona, luego de que la Oficina Anticorrupción emitiera un informe señalando irregularidades en el proceso de concesión. La administración ha anunciado que presentará alegaciones formales contra el informe que pone en cuestión la transparencia y legalidad de la adjudicación. Según fuentes internas, el gobierno busca una revisión exhaustiva del procedimiento y asegura que se actuará con estricta conformidad a las normativas vigentes.
Esta decisión viene tras una intensa polémica que ha sacudido los cimientos de la administración regional, aumentando la presión mediática y pública sobre los responsables implicados. La opinión pública y diversos sectores políticos han solicitado explicaciones claras y contundentes sobre el caso, que ahora será sujeto de una revisión más detallada. El Ejecutivo regional insiste en su compromiso con la transparencia y asegura que todas las actuaciones futuras se realizarán con la máxima transparencia y control para evitar cuestionamientos similares.
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