En el emblemático frontón Beti Jai, el ambiente se llenó de acordes y melodías en el primer concierto del año realizado por la Orquesta de Cámara de la Sierra Norte de Madrid (ONCAM), un evento organizado por la Junta Municipal de Chamberí como parte de su programación navideña. Al acto cultural asistió el concejal del distrito, Jaime González Taboada, quien fue testigo de un repertorio musical que ofreció una transición perfecta entre el pasado y el futuro, evocando tanto las notas festivas de tradicionales villancicos como las complejidades de composiciones clásicas de artistas como Mozart, Edvard Grieg, Dimitri Shostakovich, Pablo Sarasate, Astor Piazzolla, Antonio Vivaldi y Leroy Anderson.
El evento, celebrado este mediodía, representó no solo una oportunidad para disfrutar de piezas musicales de gran calibre, sino también para experimentar la singular atmósfera del frontón Beti Jai, un espacio cargado de historia que sirvió de escenario excepcional. Las interpretaciones, bajo la dirección de Sergei Mesropián, destacaron por su precisión y emotividad. Mesropián, conocido por su notable trayectoria en el ámbito de la música clásica, ha trabajado con diversos artistas de renombre, consolidando su reputación como uno de los directores de orquesta más destacados de la actualidad.
La ONCAM, integrada por 12 músicos profesionales, ha ganado reconocimiento como un pilar fundamental en la promoción de la música clásica en la región madrileña. Desde sus inicios, la agrupación ha tenido como misión esencial acercar la música de cámara a distintos públicos, especialmente en los municipios más pequeños de la Comunidad de Madrid. Con una programación diversa que incluye tanto obras clásicas como piezas contemporáneas, la orquesta ha capturado la atención de aficionados y expertos gracias a su excelencia artística y su compromiso con la difusión cultural.
Este concierto de Año Nuevo no solo marcó el inicio de un nuevo calendario, sino que también reafirmó el papel crucial de la música como vehículo para la conexión comunitaria y la celebración de la diversidad musical. Los asistentes disfrutaron de una jornada memorable, inmersos en un viaje sonoro que resonará en el distrito de Chamberí hasta el próximo encuentro con la magia de la música.