Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE, ha comparecido ante el Tribunal Supremo negando haber recibido alguna contraprestación por favorecer el amaño de obras públicas. En su declaración, Cerdán atribuye las acusaciones en su contra a una supuesta persecución política derivada de sus negociaciones con el PNV y Bildu para la investidura de Pedro Sánchez. A pesar de su defensa, la Fiscalía Anticorrupción ha solicitado prisión preventiva sin fianza, argumentando riesgo de fuga y destrucción de pruebas, propuesta respaldada por las acusaciones populares dirigidas por el PP. Cerdán, que solo respondió preguntas de su abogado, sigue en el Supremo a la espera de que el magistrado Leopoldo Puente decida su destino judicial.
La investigación conecta las acusaciones con una supuesta trama corrupta en el Ministerio de Obras Públicas durante el mandato de José Luis Ábalos. La solicitud de prisión también se justifica por un presunto riesgo de blanqueo de dinero. Cerdán ha rechazado el informe de la UCO de la Guardia Civil que lo vincula como gestor de sobornos, negando haber recibido comisiones para él o el PSOE. También refutó haber adquirido acciones en Servinabar, una empresa clave en la trama, asegurando que el acuerdo nunca se formalizó. Su vínculo con Koldo García, un implicado, remonta a su encuentro en 2010, cuando García era un escolta prejubilado interesado en el PSOE.
Leer noticia completa en El Pais.