Para muchos, la cena se ha convertido en la comida más importante de la jornada laboral, enfrentándose a la antigua creencia de que el desayuno es primordial. Durante la semana, muchos desayunan de prisa y con poco cuidado, y las comidas del mediodía se ven afectadas por el ajetreo de la rutina laboral. Así, la cena se presenta como el momento en el que finalmente se puede disfrutar de una comida sin prisas, lo cual ha llevado a reconsiderar ciertos mitos asociados a esta última comida del día.
Numerosas creencias sobre lo que se debe consumir en la cena están siendo cuestionadas. Preguntas como si los hidratos de carbono, como la pasta, contribuyen al aumento de peso nocturno, o si es mejor centrarse exclusivamente en consumir proteínas, son comunes. Además, se debate sobre la conveniencia del clásico dúo de yogur y fruta, y otros mitos como si el queso puede causar pesadillas. La dietista-nutricionista Alba Coll, de la Fundación Alicia, ofrece respuestas a estas interrogantes, sugiriendo que hay que mirar más allá de los mitos para practicar una cena saludable y apropiada.
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