A sus 85 años, el veterano alpinista no solo ha logrado recuperarse de un desafiante accidente en el Dhaulagiri, sino que también planea rendir homenaje a la histórica expedición española de 1975 que conquistó por primera vez un ‘ochomil’. En aquella hazaña tan recordada participaron López y Blázquez, quienes junto a él lograron ascender al icónico pico, marcando un hito en la historia del montañismo español. Con un espíritu incansable, el alpinista enfatiza que tener un proyecto en mente es su forma de vivir, lo que demuestra su inquebrantable pasión por las alturas y su capacidad de resiliencia ante los desafíos que la vida le plantea.
El homenaje planeado no solo busca recordar aquella histórica expedición, sino que también se convierte en una celebración de la perseverancia y el compromiso con la montaña. El alpinista ilustra cómo, a su avanzada edad, la determinación y los sueños no conocen fronteras temporales. Su historia es un testimonio inspirador para las nuevas generaciones de aventureros, recordándoles que siempre es posible levantarse y perseguir nuevas cumbres, sin importar las adversidades encontradas en el camino. Como ejemplo vivo de dedicación y coraje, su próximo proyecto es una reafirmación de los lazos indisolubles con las montañas que han definido su existencia y que continúan siendo su combustible vital.
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