El Ayuntamiento de Madrid ha implementado nuevas medidas para combatir el calor extremo, cerrando el tráfico vehicular en ciertas áreas del centro y habilitando zonas de sombra con sistemas de refrigeración en lugares públicos. Estas iniciativas buscan proteger a los ciudadanos durante la ola de calor que golpea la capital, ofreciendo refugios frescos y reduciendo las emisiones contaminantes. Además, se han habilitado puntos de hidratación y se han intensificado las recomendaciones para evitar la exposición prolongada al sol, en un esfuerzo por minimizar los riesgos a la salud derivados de las altas temperaturas.
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