Un centro de acogida gestionado por Cruz Roja enfrentó una situación crítica tras un corte de electricidad que dejó a sus residentes sin luz durante varias horas. La interrupción del suministro eléctrico, que se debió a problemas en la red local, afectó las actividades diarias del centro, incluido el acceso a calefacción y otros servicios esenciales, lo que generó preocupación tanto en el personal como en los residentes. Ante esta situación, el centro activó su plan de emergencia, logrando restablecer la luz gracias a un generador eléctrico de respaldo, lo que permitió continuar con las operaciones habituales y garantizar el bienestar de las personas atendidas.
La respuesta rápida del equipo de Cruz Roja fue crucial para minimizar el impacto del apagón. El generador eléctrico, aunque inicialmente previsto para situaciones excepcionales, cumplió con eficacia su papel, proporcionando la energía necesaria para cubrir las necesidades básicas mientras se resolvían los problemas en la red eléctrica. Este incidente ha destacado la importancia de contar con medidas preventivas y equipos de emergencia en instalaciones que brindan servicios esenciales a comunidades vulnerables. Las autoridades locales han iniciado una revisión exhaustiva para evitar futuros inconvenientes y asegurar que todos los centros de asistencia cuenten con los mecanismos adecuados para enfrentar cortes de luz inesperados.
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