El expresidente estadounidense Donald Trump ha sorprendido al mundo político al lanzar un nuevo negocio de criptomonedas, a pocos meses de las elecciones presidenciales en las que busca regresar a la Casa Blanca. Esta estrategia podría ser un intento de ganarse el apoyo de los millones de ciudadanos estadounidenses que poseen criptomonedas, a pesar de los posibles conflictos de interés que podrían surgir si resulta elegido. Trump, quien alguna vez criticó duramente al bitcoin, parece haber cambiado de postura, promocionando ahora a las criptomonedas como un pilar para convertir a Estados Unidos en la «capital mundial» de este sector. En diversos eventos, expresa su nuevo entusiasmo, destacando el papel transformador de las criptomonedas en el sistema financiero, en contraste con las regulaciones más estrictas que ha promovido la administración de Joe Biden.
La nueva empresa, World Liberty Financial, fue anunciada tras meses de preparación y aún tiene incógnitas sobre su propósito exacto. Se rumorea que podría enfocarse en el lending y borrowing de criptomonedas, con la posibilidad de lanzar su propia moneda digital. Se ha resaltado la participación de los hijos de Trump y dos conocidos emprendedores del sector, Chase Herro y Zachary Folkman, este último conocido por su estilo de vida en paraísos fiscales y su controversial pasado. La implicación de Barron Trump también ha sorprendido, siendo señalado por su entusiasmo con las criptos. No obstante, existen preocupaciones sobre los conflictos de interés que podrían emerger si Trump recupera la presidencia, dada su implicación tanto en este ámbito financiero como en su propia plataforma de redes sociales, Truth Social, acciones que podrían complicar su vuelta al poder.
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