El presidente de RTVE, José Pablo López, continúa con la reestructuración de la alta dirección de la cadena pública desde su nombramiento por Moncloa. Recientemente, López ha cesado a Marta Torralbo, directora general, y ha comunicado al consejo su intención de destituir a José Luis Muñiz, director de Producción y Medios. En lugar de Torralbo, ha designado a Eduardo Fernández, un funcionario con amplia experiencia, quien hasta ahora ejercía funciones diplomáticas como consejero de Cultura y Audiovisual en la representación de España ante la Unión Europea. Esta reestructuración parece estar enmarcada en la estrategia de RTVE de competir más agresivamente por la audiencia frente a sus rivales del sector privado.
La gestión de López también responde a investigaciones internas por gastos extraordinarios en dietas y viajes que salieron a la luz tras una auditoría de la Intervención General del Estado (IGAE). Se señala a Torralbo y Muñiz entre los implicados en estos gastos durante 2021 y 2022, lo que ha motivado los recientes cambios en la dirección. A pesar de los ajustes en el equipo, Alfonso Morales, otro de los directivos cuestionados, fue reinstalado como secretario general bajo la dirección de López, tras haber sido cesado por la anterior presidenta interina, Elena Sánchez. Estos movimientos reflejan el intento de López de sanear la imagen corporativa de RTVE y alinear su equipo directivo con la nueva dirección estratégica de la corporación.
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