En un avance decisivo hacia la mejora de las condiciones de vida para las personas con Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), el Gobierno español ha anunciado una significativa inyección de recursos destinada a reforzar la atención a la dependencia. Este miércoles, el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, se reunió con representantes de la Confederación Española de Entidades de ELA (ConELA) para detallar el nuevo decreto aprobado por el Consejo de Ministros.
La medida, que entrará en vigor este jueves, moviliza 500 millones de euros con el objetivo de implementar de manera integral la Ley ELA (3/2024) y fortalecer el Sistema de Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD). Este decreto introduce un nuevo grado de dependencia, denominado Grado III Plus, destinado a aquellos en fases avanzadas de enfermedades neurodegenerativas complejas como la ELA, garantizando una prestación integral.
Con la creación de este nuevo grado, se asegura una prestación mensual de hasta 9.860 euros por paciente. Esto permitirá la contratación de hasta cinco profesionales dedicados a proporcionar atención continua, las 24 horas del día. El Gobierno se compromete a financiar al menos la mitad de este importe, asegurando 4.930 euros mensuales, dejando a las comunidades autónomas la responsabilidad de completar el resto.
Bustinduy destacó que esta prestación es esencial para abordar necesidades críticas como la respiración y la alimentación, que son vitales y urgentes en la fase avanzada de la enfermedad. Esta inversión no solo garantiza el bienestar de los pacientes, sino que también representa un avance hacia un sistema de atención más personalizado y humanizado.
Por su parte, ConELA ha expresado su satisfacción, calificando el decreto como un “gran logro” y un cambio paradigmático en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas. Este desarrollo subraya el reconocimiento del Estado a la gravedad de la ELA y la urgencia de mejorar la calidad de vida de los afectados.
En resumen, esta decisión del Gobierno representa un paso significativo en la construcción de un sistema de atención que se adapta a las necesidades concretas de cada individuo y se basa en un enfoque proactivo para enfrentar los desafíos que imponen enfermedades tan complejas como la ELA.
Fuente: Ministerio de Consumo


