El pasado 30 de agosto, Bodegas Obergo organizó con notable éxito su anual Fiesta del Vino, reuniendo a más de 140 amantes del vino en el pintoresco Valle de Secastilla, dentro de la D.O.P. Somontano, ubicado a solo 30 kilómetros de Barbastro, Huesca. El evento, que agotó todas las entradas, ofreció una jornada única llena de experiencia culinaria, música en vivo y la degustación de sus apreciados vinos.
Los asistentes tuvieron la oportunidad de degustar el Obergo Expression Garnacha Blanca, que destacó por su frescura y elegancia, convirtiéndose en la estrella de la noche. El ambiente fue ideal para celebrar la riqueza enológica de la bodega, destacando una cena tipo cóctel diseñada por Carlos Chef y su equipo, con un cortador de jamón profesional y la preparación en directo de un chuletón de vaca Summatura, acompañado de risotto y una variedad de tapas.
Los invitados disfrutaron también de una selección completa de los vinos de Obergo, como el Obergo Antiqua Old Vines Garnacha y el Obergo Parcelario, ambos muy bien valorados por la Guía Peñín y Robert Parker. Además, la opción de pedir copas o botellas permitió a los asistentes disfrutar del vino a su ritmo.
La música en directo del grupo zaragozano Contrabando añadió una vibrante atmósfera, animando a los presentes a bailar tras la cena. La fusión de música, gastronomía y vino creó un ambiente festivo y armónico que realzó la experiencia general. Joaquín Vidal, gerente de Bodegas Obergo, expresó el entusiasmo ante el interés generado y confirmó la próxima edición del evento para agosto de 2026, destacando el compromiso de la bodega con el enoturismo de calidad.
El Obergo Expression Garnacha Blanca, desarrollado con uvas cultivadas a altitudes específicas para lograr una maduración lenta y uniforme, fue elogiado por sus aromas frescos y su capacidad de maridaje. Este vino protagonizó una noche dedicada a integrar tradición y modernidad, posicionando a Bodegas Obergo como un referente en la región para los entusiastas del vino.
La Fiesta del Vino de Obergo no solo celebra la viticultura local, sino que también afianza su prestigio como un destino clave para el enoturismo, ofreciendo a los visitantes una experiencia inolvidable que combina visita a los viñedos, catas y una gastronomía excepcional.