La Bolsa y Mercados Españoles (BME) ha dado un paso significativo hacia la modernización del sistema financiero europeo al recibir el visto bueno del Banco de España para implementar su innovador sistema de liquidación de transacciones de divisas, conocido como FXS. Este mecanismo, basado en el modelo de pago contra pago, está diseñado para transformar la eficiencia y disminuir los riesgos inherentemente asociados con las operaciones de cambio de divisas.
El FXS se propone eliminar el riesgo de principal, una problemática común en la liquidación bilateral donde, históricamente, una de las partes podría perder la totalidad de la transacción si la otra incumple. Entidades bancarias y financieras han destacado que este tipo de riesgo incrementa el uso de líneas de crédito, limitando así el volumen de operaciones. Con este nuevo sistema, se espera aliviar esas restricciones, permitiendo aumentar las transacciones y reducir la dependencia de líneas crediticias.
El sistema no solo integrará la red SWIFT, sino también ofrecerá neteo de operaciones, lo que simplifica la liquidación y optimiza el uso del capital, reducirá costos operativos de manera significativa. Este avance tecnológico no se limitará a beneficiar exclusivamente a las entidades españolas, sino también a aquellas situadas en el resto de la Unión Europea y Suiza. Según datos del Banco Internacional de Pagos, en España, las transacciones de cambio de divisas ascienden a 18.000 millones de euros diarios, exponiendo continuamente a las entidades a riesgos bilaterales.
José Manuel Ortiz, Head Securities Services a.i., expresó su satisfacción con esta iniciativa que busca satisfacer las crecientes necesidades de los clientes de BME. Ortiz subrayó la neutralidad y solidez de las infraestructuras de BME, las cuales asegurarán un sistema seguro y altamente disponible. La implementación del FXS posiciona a BME a la vanguardia de la eficiencia en las operaciones cambiarias en el continente.
Por otro lado, BME ha adelantado que explora nuevas iniciativas para ampliar su participación en el mercado de divisas, buscando diversificar su oferta y mejorar el rendimiento de su tecnología y capacidad de distribución. Esta estrategia tiene como objetivo consolidar a BME como un líder en innovación financiera, proyectando un futuro más eficiente y seguro para las transacciones de divisas.