El presidente chileno, Gabriel Boric, ha dado la bienvenida a su primera hija, Violeta, junto a su pareja, Paula Carrasco, una química ambiental y exseleccionada nacional de baloncesto. Este acontecimiento marca un hito en la historia reciente de Chile, pues Boric es el primer mandatario en las últimas décadas en convertirse en padre mientras ejercía el cargo. El nacimiento de Violeta ha ocurrido en el Hospital Clínico de la Universidad de Chile, conocido como el Jota Aguirre, coincidiendo a menos de un año de que Boric finalice su mandato en marzo de 2026. La familia, actualmente establecida en el barrio Yungay, planea mudarse pronto a San Miguel, lo que refleja un deseo de acercarse a un ambiente más familiar y adecuado para criar a su hija.
El anuncio del nacimiento de Violeta ha generado un gran interés tanto dentro como fuera de Chile, con expectativas sobre el impacto que esto podría tener en la imagen de Boric, potencialmente mejorándola. Durante el embarazo, Carrasco ha mantenido un perfil bajo en eventos oficiales, aunque se les ha visto juntos en actividades culturales. El presidente ha expresado su deseo de ser un padre presente y apoyar el desarrollo independiente de su hija, asegurando que le gustaría que Violeta sea reconocida por sus propios méritos. Esta nueva etapa familiar coincide con un momento político crucial para Boric, quien mira hacia el futuro con posibles intereses en una nueva fase de liderazgo dentro de la izquierda chilena después de dejar el cargo, planeando dedicar más tiempo a su familia antes de retomar cualquier papel político.
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