Bertha María Alcalde asumió este martes como la nueva titular de la Fiscalía General de Justicia de Ciudad de México, con la promesa de trabajar para garantizar el acceso a la justicia sin distinción de clase social o política. Su nombramiento fue aprobado por el Congreso capitalino, con un apoyo mayoritario de 51 votos provenientes del bloque oficialista y parte de la oposición, mientras los 15 votos en contra provinieron del grupo parlamentario del PAN. Bertha Alcalde, hija de Bertha Luján y hermana de Luisa María Alcalde, llega al cargo tras haber sido parte de ternas para otros puestos federales y luego de un período como directora del ISSSTE. Con un currículum que incluye la formación de jueces y la implementación del sistema de justicia acusatorio, su elección se da en un contexto donde se busca reforzar la procuración de justicia durante un mandato de cuatro años, ampliable por otro período similar.
A pesar del apoyo en su designación, la elección de Alcalde no ha estado exenta de controversias. La oposición ha señalado posibles conflictos de interés debido a su estrecha relación con figuras prominentes de Morena, el partido en el poder. Andrés Atayde, del PAN, expresó su preocupación por la falta de autonomía que podría comprometer la imparcialidad de la fiscalía. Por otra parte, los legisladores de Morena defendieron fervientemente su nombramiento, contrastándolo con el intento fallido de reelección de Ernestina Godoy, fiscal durante la administración de Claudia Sheinbaum. Martha Ávila, diputada de Morena, acusó a la oposición de dinamitar procesos previos en aras de mantener ciertos privilegios y venganza política. Clara Brugada, jefa de Gobierno de la capital, respaldó públicamente la elección de Alcalde, destacando su honestidad y amplia preparación para el cargo.
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