Benidorm se presenta como un destino vibrante y versátil, ideal para disfrutar en cualquier época del año. Con su clima privilegiado, esta ciudad costera se convierte en un refugio vacacional ininterrumpido, donde se pueden gozar días soleados durante casi todo el año. Su oferta incluye playas emblemáticas como Levante y Poniente, además de calas recónditas como Tío Ximo y Almadrava, perfectas para el esnórquel y quienes buscan un rincón de tranquilidad. Benidorm no solo destaca por su litoral, sino también por su reconocible skyline, uno de los más prominentes de Europa, que refleja el modelo de urbanización vertical que ha adoptado para mezclar modernidad y sostenibilidad.
Por otro lado, la simbiosis de Benidorm con su entorno natural es innegable, con la imponente Serra Gelada y el majestuoso Puig Campana como telón de fondo. Estos parajes ofrecen múltiples senderos que permiten combinaciones únicas de mar y montaña, ofreciendo a locales y turistas una experiencia inolvidable de naturaleza en estado puro. La ciudad también deleita a sus visitantes con una rica tradición culinaria mediterránea, donde los arroces y tapas en terrazas al aire libre se vuelven protagonistas. Sin olvidar las jornadas gastronómicas que exploran la esencia culinaria local. Benidorm, una ciudad que redefine el concepto de infinitud, sigue siendo un faro de atracción turística en la Costa Blanca.
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