El Ayuntamiento de Barcelona, liderado por el alcalde Jaume Collboni, está implementando este verano un «Programa de sombras» como respuesta al aumento de temperaturas y olas de calor provocadas por el cambio climático. Esta iniciativa pretende adaptar el espacio público de la ciudad mediante la instalación de toldos, la plantación de árboles y otras estructuras para ofrecer refugio del sol. Este verano se instalarán 70 nuevos toldos, priorizando áreas como parques infantiles, y se planea que en 2027 la ciudad cuente con 194 nuevos espacios de sombra. Durante la presentación en el parque Antonio Santiburcio, Collboni enfatizó la vulnerabilidad de Barcelona al calor, especialmente debido a su alta densidad poblacional y el hecho de que el 21% de sus habitantes supera los 65 años.
El ambicioso programa busca agregar 50,000 metros cuadrados de sombra, lo equivalente a siete campos de fútbol, con una inversión de 13 millones de euros. Esta medida comenzará en los patios de las escuelas y áreas de juegos infantiles. Actualmente, el 62% del espacio público ya cuenta con sombra, pero se identificó un 19% donde la intervención es prioritaria. Se están realizando diagnósticos para cruzar datos sobre el uso de espacios y su vulnerabilidad al calor. El objetivo es que para 2027, 303 áreas de juego dispongan de sombra. Además, se instalarán sombras en lugares estratégicos como patios escolares y plazas públicas. Las experiencias pasadas, como la sombra en la plaza Comercial del Born, serán evaluadas para mejorar la implementación de este programa.
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