El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido rechazar la visita de un grupo de educadores de la escuela israelí ‘Mandel School for Educational Leadership’, debido a su conexión con el gobierno de Benjamin Netanyahu. Esta decisión surge después de que la misión, solicitada por la Embajada de Israel en España, buscara conocer los modelos de la ciudad en políticas educativas para comunidades desfavorecidas. El vínculo entre el centro educativo y el Ministerio de Educación israelí ha sido la razón principal de esta negativa, que marca un cambio en la relación institucional de la ciudad con Israel.
Esta postura contrasta con la de la administración anterior, liderada por Ada Colau, cuya suspensión de relaciones con el gobierno israelí fue deshecha por el actual alcalde, Jaume Collboni. No obstante, el Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC) ha anunciado que presentará una proposición en el pleno del Ayuntamiento para reinstaurar la suspensión de relaciones hasta que se logre un alto al fuego definitivo en la Franja de Gaza. Además, el Ejecutivo municipal busca, de manera «temporal», cancelar el hermanamiento con Tel Aviv, que se mantiene desde 1998, resaltando así un giro significativo en la política exterior de Barcelona.
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