En un emocionante encuentro en el estadio de Son Moix, Raphinha se erigió como la figura clave para el Barcelona al marcar dos goles que aseguraron la victoria sobre el Mallorca. El equipo, que afrontaba el partido con la necesidad urgente de sumar tres puntos, encontró en el brasileño la respuesta a sus apuros tras una racha de empates. Raphinha, visiblemente satisfecho, declaró estar en su mejor momento personal, pero con la clara intención de seguir contribuyendo al éxito del equipo. Su brillante actuación no solo trajo tranquilidad a los dirigidos por Hansi Flick, sino que también subrayó la cohesión entre el esfuerzo individual y el colectivo que el equipo había estado buscando.
El técnico Hansi Flick expresó su satisfacción al término del partido, destacando la concentración y entrega de sus jugadores. Antes del inicio, había insistido en la necesidad de enfocarse y evitar errores, un mensaje que parecieron captar sus pupilos en el campo. Además de Raphinha, las anotaciones de Ferran, Frenkie de Jong y Pau Víctor evidenciaron el despertar de varios jugadores que necesitaban reivindicarse tras un inicio de temporada titubeante. Esta victoria no solo representa un alivio en la clasificación, sino que también refuerza la moral del plantel, mostrándose listo para afrontar los desafíos venideros con una renovada confianza.
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