El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado un ambicioso plan para renovar su flota de autobuses urbanos, apostando por la sostenibilidad y la eficiencia energética. Según fuentes del consistorio, se prevé la adquisición de más de 500 nuevos autobuses eléctricos que sustituirán progresivamente a los vehículos de combustibles fósiles que aún operan en la capital. Esta medida forma parte de un esfuerzo más amplio para reducir las emisiones de CO2 y otros contaminantes dentro de la ciudad, en línea con los compromisos internacionales adquiridos por España en materia de cambio climático.
El proyecto, que cuenta con una inversión de varios millones de euros, también contempla la adecuación de las infraestructuras necesarias para garantizar el correcto funcionamiento de esta nueva flota. Esto incluye la instalación de estaciones de carga rápida en puntos estratégicos y la actualización de los talleres de mantenimiento. La iniciativa ha sido bien recibida por las organizaciones ecologistas, aunque han pedido que se sigan implementando medidas complementarias para fomentar el uso del transporte público. Por su parte, el alcalde ha destacado la importancia de este plan como un paso fundamental hacia una movilidad más sostenible y ha expresado su confianza en que sirva como modelo para otras grandes ciudades.
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