En medio de una creciente tensión política, la dirigente madrileña ha lanzado un contundente mensaje en el que asegura no estar siendo investigada por ninguna entidad judicial. Esta afirmación se produce en el contexto de una serie de investigaciones que involucran a figuras destacadas de su entorno, como la esposa de un alto cargo, el número dos del partido en el Gobierno, así como el número tres del PSOE y el Fiscal General del Estado, entre otros. La situación ha generado un clima de incertidumbre que pone en el foco la integridad de las instituciones políticas y judiciales del país.
El contexto político se complica aún más con las acusaciones cruzadas y las sospechas que rodean a varias figuras clave de la administración. La dirigente ha buscado distanciarse de estos escándalos, enfatizando que su nombre no figura en ninguna de las investigaciones en curso. Este pronunciamiento intenta reafirmar su posición de liderazgo y transparencia ante el electorado, mientras el partido enfrenta una de sus etapas más críticas en términos de confianza y estabilidad interna.
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