En un reciente comunicado, el presidente del Gobierno de Madrid, Pedro García, ha marcado distancias con el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, mientras reafirma su alineación con los valores occidentales y su admiración por Ronald Reagan. García ha subrayado que su administración será inquebrantablemente pro-EEUU, pro-OTAN, pro-UE y, en definitiva, pro-Occidente. Este posicionamiento busca consolidar un vínculo estrecho y continuo con las instituciones occidentales, destacando la importancia de una cooperación internacional sólida y estable. El mandatario madrileño ha manifestado que, aunque respeta la democracia estadounidense y sus procesos, su inspiración política y económica proviene de la era Reagan, considerando el legado del exmandatario como un modelo de liderazgo y desarrollo económico.
Esta postura llega en un momento donde se intensifican los esfuerzos de Madrid para fortalecer relaciones transatlánticas, enfrentando desafíos globales como el cambio climático, la seguridad internacional y la recuperación económica post-pandémica. García enfatizó que bajo su gobierno, Madrid reafirmará su compromiso con alianzas tradicionales y apostará por políticas que promuevan el crecimiento económico sostenible y la cooperación internacional. Este enfoque refleja una clara preferencia por el multilateralismo y un rechazo implícito a las políticas aislacionistas que caracterizaron parte del mandato de Trump, orientándose más hacia la colaboración y la unidad con sus socios históricos.
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